Mosca doméstica posada sobre un cristal

Mouche domestique

Las moscas domésticas (Musca domestica) se encuentran entre los insectos más comunes y familiares para los seres humanos. Viven en casi todas las regiones del mundo y se adaptan muy bien a los entornos habitados por el hombre. Aunque son pequeñas, desempeñan un papel importante en los ecosistemas, pero también en la propagación de enfermedades.

Identificación
  • Tamaño: de 5 a 8 mm de largo
  • Apariencia: cuerpo gris-negro, con cuatro líneas oscuras en el tórax, ojos rojos prominentes, alas transparentes.
  • Vida útil: aproximadamente de 2 a 4 semanas, pero una hembra puede poner hasta 500 huevos durante su vida.
Ciclo de vida
  1. Huevo: puesto en materia orgánica en descomposición (basura, excrementos, cadáveres).
  2. Larva (gusano): se alimenta de la materia en la que nace.
  3. Ninfa: fase de transformación.
  4. Adulto: listo para reproducirse en pocos días.

El ciclo completo puede durar entre 7 y 10 días, dependiendo de la temperatura.

Papel en la transmisión de enfermedades

Las moscas domésticas son vectores mecánicos de numerosos agentes patógenos, ya que se posan sobre la basura, los excrementos o los cadáveres y, posteriormente, sobre los alimentos destinados al consumo humano.

Pueden transportar:

  • Bacterias: Salmonella, E. coli, Shigella
  • Parásitos intestinales
  • Virus
  • Huevos de gusanos (helmintos)

Enfermedades asociadas: diarrea, tifoidea, cólera, disentería...

Contaminan principalmente por:

  • Contacto de sus patas o alas con los alimentos
  • Regurgitación (vomitan los jugos digestivos antes de absorber los alimentos)
  • Excrementos (defecan con frecuencia)
Utilidad en la naturaleza

Aunque molestas, también tienen funciones ecológicas:

  • Descomposición: ayudan a reciclar la materia orgánica.
  • Alimento: son una fuente de alimento para muchos animales (aves, arañas, anfibios...).
  • Investigación científica: sus larvas (gusanos) se utilizan en medicina forense y en algunas terapias (desbridamiento de heridas).
Control y prevención
  • Mantener los lugares limpios y secos (los huevos necesitan humedad).
  • Utilizar mosquiteras, trampas, insecticidas o plantas repelentes (albahaca, lavanda, menta).
  • Cubrir los alimentos y gestionar bien los residuos.
  • Favorecer la presencia de depredadores naturales (murciélagos, pájaros).
Pequeña anécdota

Las moscas domésticas son incapaces de picar, ya que no tienen piezas bucales para ello. Aspiran los alimentos en forma líquida. Si encuentran un alimento sólido, lo «predigieren» cubriéndolo con saliva digestiva.

(Fuente: Chat GPT)