La gallineta común (Gallinula chloropus), también conocida simplemente como gallineta, es un ave de tamaño mediano que se encuentra en entornos acuáticos como estanques, charcas y ríos con vegetación densa. Se distingue por su plumaje entre negro pizarra y azul oscuro, con reflejos marrones en las alas y una línea blanca claramente visible a lo largo de los flancos. Su pico cónico y puntiagudo, de color rojo brillante con la punta amarilla, está rematado por una característica mancha roja en la frente. Sus patas son largas, de color amarillo verdoso y no palmeadas, lo que le permite desplazarse con facilidad sobre la vegetación flotante. La gallineta mide alrededor de 32 a 38 cm de largo con una envergadura de 50 a 55 cm y pesa entre 260 y 400 g.
Muy cómoda tanto en el agua como en tierra, la gallineta es omnívora: se alimenta de plantas acuáticas, semillas y bayas, así como de pequeños animales (insectos, moluscos, larvas). Siempre alerta, puede ser tímida o familiar según la situación, volviéndose ruidosa y defendiendo enérgicamente su territorio durante la época de cría. Su característico balanceo de la cabeza al nadar y el meneo de la cola al caminar hacen que sea fácil de detectar. Construye nidos bien escondidos en la vegetación y puede tener varias nidadas cada año, ayudando a veces las crías de la primera a alimentar a las de la segunda.
Fuentes: Perplexity.ai & oiseaux.net